Un truco sabio por todo el mundo es que si presentamos las verduras en forma de crema acostumbran a gustar más a los niños. Por este motivo esta ha sido una de las recetas elegidas para formar parte de los menús del 50 cumpleaños. Tienen buena aceptación entre los niños y, además, son ejemplo de cocina de aprovechamiento porque podemos usar las verduras que encontramos en la despensa o en la nevera. Lo que hemos cocinado al cerrar el curso del Farinetes Tour estaba hecha a base de cebolla, patata, calabacín, zanahoria y judía tierna

En casa las podéis preparar con cualquier verdura de temporada y así ir variando según la estación del año. Un sofrito de cebolla o puerro hecho con aceite de oliva puede ser la base de la crema y, si la queremos suavizar, podemos añadir caldo vegetal.

Para dar un toque en el momento de presentarla podemos añadir frutos secos, queso rallado, virutas de jamón, los clásicos picatostes de pan, huevo o, incluso, verdurita cortada a trocitos. También podemos jugar con los colores, que pueden ir del verde al blanco pasando por la calabaza, para que entre por los ojos y sea más atractivo por los pequeños. Otra opción es incorporar frutas como la manzana y la pera para dar un toque dulce, aromáticas como el hinojo o el romero, además de especies como el comino, la pimienta o los currys.

Para preparar las siguientes cremas, podemos sofreír cebolla y después cocer las verduras que elegimos para después triturarlas, dar el punto de sal y añadir los condimentos que combinen mejor.

  • Cebolla, calabacín y un toque de hierbas provenzales.
  • Puerro, calabaza, zanahoria y un poco de manzana.
  • Cebolla, champiñones y un toque de ajo y perejil.
  • Cebolla, patata y brécol.
  • Puerro, un poco de patata, coliflor y apio.
  • Una base de patata, cebolla, acelgas y zanahoria.